Bienvenida

"Y en su propio lecho de muerte, desnuda la vida le abandonó..."

Cual gaviota agonizando
la vida reluciente en mi ventana ha de golpear,
se enmaraña por mis venas en aletargado caudal,
y de vez en cuando, y de cuando vez
el nombre de nuestra amada ha de pronunciar:
poesía! Oh poesía!

Dulce Melodía.



Sólo Yo

jueves, 17 de enero de 2008

 

Escúchame,

mírame,

ayúdame

Desespero,

lluvia

¡Qué silencio!

Grito,

espero,

enfermo

Repugno,

ruego

¿Qué deseo?

No veo

¿Dónde están?

Al fin comprendo

Tropiezo,

desisto,

muero.

1 comentarios:

La fleur Foncee dijo...

Me gusta, aunque me parece que podrías comenzar a explotar un poco más los recursos literarios formales.
de cualquier forma está muy bueno tu trabajo.

saludos...
Au revoir